martes, 1 de diciembre de 2009

De los insonoros pasos de la Victoria

Los olvidados, los que gustan de mirar los ocasos, los contorsionistas de la luz. Todos los que se apiñan ante los brotes tiernos, los que saben de encrucijadas llenas de signos que les atraen como grandísono imán, los que atraviesan de puntillas las diagonales de los días. Todos gustan del arrullo de la clara sonrisa, de los corpiños que se pasean por zaguanes, teatros o esquinas. El susurro de ese gorrión henchido de dolor les aturde y les traspasa. Anhelantes, aguardan su paso aunque escarbe en ellos, hormiguee en sus conciencias y les haga escupir dudas y silencios rotos. Sus insonoros pasos atraviesan el corredor y las ausencias la rodean. Nadie asoma pero vence al vacío, gacela devoradora de sombras. Sale a escena y vence. Todos callan.
( A Victoria, de la película "El baile de la Victoria" de Fernando Trueba.)

No hay comentarios:

Publicar un comentario